La persona que cambiará tu vida

¿Cómo sabes que ésa es la persona que te va a hacer feliz? -preguntó mi amigo cuando le dije que estaba empezando a conocer a alguien y que sabía que era la única persona capaz de cambiar mi vida.

– Lo sé porque me acepta como soy -le dije- porque sabe quererme a pesar de que no soy perfecta, porque no me juzga, porque me perdona cuando me equivoco, porque acepta mi pasado sin reservas, porque no le hace daño lo que los demás digan de mí, porque cree en mí y en que soy capaz de conseguir lo que me proponga, porque me encanta que tenga la madurez suficiente para reírse de mis torpezas, porque me recuerda todos los días que hay mucha gente que me quiere, porque me anima a que explore el mundo, a que me ría, a que me divierta y disfrute mi tiempo con gente que merezca la pena. Porque sé que nunca me va a fallar…

– ¿Y quién es esa persona tan maravillosa?- preguntó escéptico.

– Esa persona soy yo- contesté.

En momentos de crisis personal crecemos y nos conocemos mejor a nosotros mismos, aprendemos a reconocer lo que nos gusta, lo que queremos y lo que no, y es así como podemos empezar a cambiar nuestra vida y encaminarla en la dirección que queremos.

Si lo que esperamos es que aparezca la persona que cambiará nuestra vida, dejaremos nuestro camino en sus manos y nos llevará por el suyo. Posiblemente eso nos haga feliz durante un tiempo, pero seremos emocionalmente dependientes y  tarde o temprano nos sentiremos frustrados e infelices y con la necesidad de buscar nuestro propio camino.

La única persona con poder para cambiar nuestra vida en la dirección que queremos, somos cada uno de nosotros, y seguro que en ese camino, que es el nuestro, coincidiremos con personas de las que no necesitemos que cambien nuestra vida, sino simplemente que formen parte de ella.