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¿Cómo identificar al perverso narcisista?
El perverso narcisista es un ser egoísta y con un gran sentimiento de superioridad, que utiliza la seducción y la manipulación para establecer vínculos con sus víctimas y utilizarlas para satisfacer sus deseos. Incapaz de sentir empatía y de aceptar su culpa, proyecta en los demás sus propios conflictos, destruyendo la autoestima de sus presas y atrapándolas en una relación de dependencia emocional.
¿Cómo saber si nos encontramos ante un perverso narcisista? Para aprender a reconocerlos podemos empezar por analizar sus rasgos más característicos.
Rasgos y comportamiento del perverso narcisista:
1. Utiliza la seducción para crear el vínculo con su víctima.
El perverso narcisista resulta encantador para quien no le conoce en profundidad, tiene un magnetismo que le hace irresistible y le otorga gran capacidad de influencia y dominación. Éste es uno de los rasgos que hace que atrapen a sus víctimas y que les dificulte ver que se están metiendo en una relación tóxica.
2. Crea dependencia emocional.
Con ello afianza el vínculo que ha creado a través de la seducción. Para hacerlo, ataca la autoestima de su víctima, destruye su autoconfianza, la aísla de su entorno y le hace creer que sin él no es nada.
3. No siente culpa por sus actos.
El perverso narcisista no reconoce sus errores y es incapaz de asumir su responsabilidad ante los problemas, por lo que culpa a las otras personas de los mismos. Esto no sólo afecta negativamente a la autoestima de su víctima, sino que también hace imposible que el perverso narcisista modifique su comportamiento.
4. Tiene un gran sentimiento de superioridad.
Se adora a sí mismo y está convencido de que vale mucho más que los demás, por lo que exige que se le trate con la atención y los privilegios que cree merecer.
5. Carece de empatía.
Es incapaz de darse cuenta de los sentimientos, deseos, necesidades y derechos de los otros, por lo que tampoco siente responsabilidad ni arrepentimiento sobre el daño que les pueda estar causando.
6. Es egoísta.
El perverso narcisista no sólo antepone sus deseos y necesidades a las de los demás, sino que también utiliza a las personas para lograr su propia satisfacción, conseguir sus objetivos y alimentar su ego.
7. Es manipulador.
Maneja a las personas y las manipula para conseguir lo que se propone, aludiendo al deber, al amor, a la amistad o incluso a la culpa de la víctima, para que ésta se sienta obligada a satisfacer sus deseos.
8. Utiliza la proyección como mecanismo de defensa.
Incapaz de afrontar adecuadamente sus propios conflictos, los proyecta en su víctima y la acusa de pensar o de actuar de forma reprochable, porque, aunque no lo reconoce, sería como actuaría él si estuviera en el lugar de la víctima.
¿Es posible librarse de un perverso narcisista?
Sí, y el paso más importante es desenmascararlo a través de los rasgos que les caracterizan y aprender a reconocer cuándo está utilizando tácticas para destruir tu autoestima, para aislarte, para manejar tu voluntad, para culparte de sus problemas, para satisfacer su ego… y no caer en la trampa de dejarte seducir por sus palabras y sus promesas, porque el mayor poder del perverso narcisista es la manipulación.